Bolsonaro paseó en jet de ski el día que Brasil superó las 10 mil muertes por covid-19
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, hizo un paseo en jet-ski en el lago Paranoá, de la ciudad brasileña Brasilia, mientras que cientos de sus simpatizantes marcharon en su apoyo, donde enarbolaron carteles con ataques al Supremo Tribunal Federal (STF) y al Congreso.
«Nada más democrático que el pueblo en calle apoyando a su presidente. Corremos riesgo en la calle, pero también al quedarnos en nuestras casas, riesgo a que nuestra libertad sea cercenada», dijo la diputada bolsonarista Bia Kicis, una de las organizadoras del acto, quien convocó a la marcha a los que «tienen miedo de tener un país gobernado por tiranos» que imponen cuarentenas que “aquí no funcionan”.
A pesar de los 10.000 muertos desde el inicio de la pandemia del coronavirus (orthocoronavirinae), el Jefe de Estado brasileño continúa desoyendo las reiteradas recomendaciones de las autoridades sanitarias y hasta deslizó sus ganas de hacer un asado para «miles de invitados», aunque minutos después terminó desdiciéndose.
Bolsonaro insistió al acercarse a una embarcación de sus seguidores, que su país vive una «neurosis» con el covid-19 y reiteró previsiones cerca de que el 70% de los 215 millones de brasileños de contagiarán del virus.
Tras conocerse el sombrío reporte, el Congreso decretó el luto oficial por tres días en tributo a los muertos por la pandemia, por lo que quedaron prohibidas todas las celebraciones y festividades en ese lapso.
«Este Parlamento, que representa el pueblo y el equilibrio federativo de esta Nación, no está indiferente a este momento de pérdida, de tristeza y de pesar», señalaron los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado, Rodrigo Maia y Davi Alcolumbre, respectivamente, en un comunicado conjunto.