31 de mayo: Día Mundial sin Tabaco
Cada año se conmemora esta jornada para reflexionar sobre el daño que produce el tabaco y los riesgos que supone su consumo para la salud.
La campaña global del Día Mundial Sin Tabaco busca mostrar la importancia de la lucha contra la epidemia del tabaquismo: la principal causa de muerte prevenible en todo el mundo.
Actualmente, en Argentina el 19,5% de la población es fumadora, ocupando el 17,6% varones y el 21,1% mujeres. La prevalencia de consumo de tabaco (cigarrillos) en la provincia fue de 22,2%, en la última encuesta de factores de riesgo realizada en 2018.
Además, el tabaco mata cada año a casi 6 millones de personas, de las cuales más de 600.000 son no fumadores que mueren por haber respirado humo pasivamente.
En San Juan, en el año 2020 se realizó el Test de Seguimiento de Enfermedades Crónicas y la Encuesta de Adolescentes, los cuales arrojaron los siguientes resultados:
- 18% de los encuestados con enfermedades crónicas no transmisibles fuma, con predominio del sexo femenino (60% son mujeres).
- 4% de los adolescentes encuestados consumen cigarrillos de manera diaria.
- 81% de los jóvenes fuma menos de 10 cigarrillos al día, lo que es un buen indicador para cesación ya que tienen una dependencia baja.
- 8% de los adolescentes consumen cigarrillo electrónico y un 14% consumen cigarrillos sueltos.
El fumador pasivo que es aquel que respira el humo de segunda mano emitido por la persona que fuma. Muchos niños están expuestos al humo incluso desde antes de nacer y sufren las consecuencias: bajo peso al nacer, aumento de la tasa de muerte súbita, enfermedades respiratorias, asma, etc.
Es fundamental saber que el proceso de abandonar el consumo de tabaco arranca cuando se toma la decisión. Existen diferentes opciones para lograr este objetivo, para cada persona puede funcionar una distinta.
Fumar incluso un cigarrillo al día puede ser mortal. Un cigarrillo al día aumenta un 50% el riesgo de sufrir un infarto de miocardio. A las personas que se les hace un hábito, les presentan un riesgo todavía más alto. Cualquier cantidad de tabaco que se fume resulta perjudicial para la salud y dejar de fumar es la única opción saludable.
Entre las opciones que pueden ayudar al fumador a dejar este hábito podemos destacar: esperar al menos 3 minutos; las ganas de fumar pasarán, tomar agua o jugos, buscar alguna distracción, alejarse de la situación, hacer algo diferente, respirar lenta y profundamente por la nariz expulsando el aire con lentitud por la boca.
La adicción al tabaco se puede prevenir y sus riesgos pueden disminuir con el tratamiento temprano y adecuado.
