Donar órganos es un acto de solidaridad que salva vidas
Cada 30 de mayo se conmemora el Día del Donante con el claro objetivo de reforzar esta práctica que salva y mejora la calidad de vida de miles de personas.
Las campañas de concientización sobre la donación y sobre la gran demanda de órganos que existe actualmente resultan trascendentales para entender el grado de solidaridad, compromiso con la comunidad y esperanza de vida que implica y genera la persona declarada donante activa o bien, en algún momento, decide donar un órgano o tejido.
Actualmente, la práctica de donación de órganos está regulada por el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI), rige esta actividad según la legislación vigente.
En nuestra provincia el encargado de regular dicha actividad es el Instituto de Ablación e Implante San Juan (INAISA) depende del Ministerio de Salud de la Provincia. Además, estos institutos están a cargo del relevamiento de datos y registros que contengan toda la información pertinente a donantes activos, cantidad de personas a la espera de donaciones, donaciones realizadas, etc.
Esta fecha, establecida a partir de 1998 en Argentina, se conmemora en honor al día en que nació Dante, hijo de la primera beneficiaria de trasplante de hígado que se realizó en un hospital público de Buenos Aires en el año 1995. En este sentido, la conmemoración connota además la posibilidad que puede alcanzar un trasplante: dar vida ayuda a dar vida.
El coordinador de INAISA, Dr. Fernando Sarmiento, reflexionó: “Una comunidad consciente de la importancia que implica la donación de órganos, del poder que guarda esta actividad respecto al mejoramiento de vidas, es una comunidad con un alto nivel de compromiso ciudadano que, como resultado, garantiza mejores calidades de vida, salud y pueda alojar cualquier persona que en determinado momento necesite un trasplante de órganos o tejidos”.