El Movimiento Evita evitó enfrentarse a Cristina Kirchner pero insistió en su armado político para 2023
“El principal mandato es ganar, no hay alternativa, hasta el último día de este gobierno vamos a intentar que al Presidente le vaya lo mejor posible”, sostuvieron en un documento.
Con una defensa cerrada a la economía popular; sin críticas directas o explícitas a Cristina Fernández de Kirchner; con reclamos al Congreso Nacional para que se aprueben leyes como la de Tierra, Techo y Trabajo y la firme decisión de competir en los comicios de 2023 a través de la construcción “de un espacio político y social de los movimientos populares” para “ya no ser espectadores de los acuerdos de otros”; el Movimiento Evita, el más albertista de todas las organizaciones sociales, cerró el 6to Congreso Nacional “Oscar Valdovinos” del que participaron otros dirigentes del campo popular como Juan Grabois del Movimiento de Trabajadores Excluidos; Juan Carlos Alderete, líder de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y Daniel Menéndez coordinador nacional de Somos Barrios de Pie.
Ese nueva agrupación, que formara parte del Frente de Todos será “un espacio político que pueda debatir un proyecto de país que tenga en el centro a la economía popular y el protagonismo de las mayorías en la política”.
El objetivo, según destacaron en el documento final, es: “Fortalecer el Frente de Todos, fortalecer la unidad de más y más sectores para que 2023 no sea recordado como el año en que el neoliberalismo volvió al gobierno, sino el año en el que la unidad del peronismo volvió a demostrar que tiene capacidad de gobernar la Argentina y construir unidad nacional en favor de las grandes mayorías populares”.
El debilitamiento de Alberto Fernández ante los embates que recibió por parte del kirchnerismo, sobre todo de Cristina Fernández y el diputado nacional Máximo Kirchner, habían llevado al anuncio de la intención de formar un nuevo partido político. El congreso del sábado lo reafirmó y potenció.
Al promediar el encuentro, una pantalla gigante transmitió el saludo de Alberto Fernández, Sergio Massa, Juan Manzur, Héctor Daer, Malena Galmarini, Wado De Pedro y Pablo Moyano.
Los 78 segundos de los mensajes editados fueron una muestra más de distención que intenta demostrar el gobierno después de dos semanas de crisis interna en la que renuncio el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien fue reemplazado por Silvana Batakis, una economía cercana a la dos veces mandataria de la Argentina.
La presencia del ministro del Interior en el video, un hombre de La Cámpora y cercano a Cristina Kirchner también fue significativo y va en el mismo sentido: mostrar la nueva unidad dentro del Frente de Todos.
“El principal mandato es ganar, no hay alternativa, el Movimiento Evita hasta el último día de este gobierno va a intentar que al Presidente le vaya lo mejor posible, porque si le va bien, a nuestro pueblo le va bien”, expresó con firmeza Emilio Pérsico, uno de los líderes del Evita, junto a Fernando “Chino” Navarro, al cerrar el encuentro.
En el documento final se hizo una referencia explícita a la interna del Frente de Todos, que los últimos días trataron de moderar.
“Vivimos una situación económica y social difícil después de una pandemia que golpeó al mundo entero, no solamente en lo económico, sino también en la esperanza de que un mundo mejor puede existir. La salida de esa situación llevará mucho tiempo, y mucho más en una economía como la Argentina que ya venía golpeada por políticas neoliberales y por una deuda externa insostenible. Nuestro gobierno ha trabajado incansablemente, pero eso no es suficiente. No es suficiente porque dos años y medio es muy poco tiempo para reorientar la economía y a pesar de haber crecido enormemente, los resultados van a tardar en sentirse; no es suficiente porque Argentina acarrea problemas estructurales que solo se terminarán con soluciones de fondo, como la inflación, la concentración económica y la restricción externa; y no es suficiente porque la unidad de nuestro frente político necesita fortalecerse y superar las diferencias que a veces priman sobre los acuerdos”, sostienen los dirigentes populares más afines al Jefe de Estado.
La fecha del encuentro fue fijada hace meses, pero coincide con los cuestionamientos que realizó la Vicepresidenta al Movimiento Evita por la “tercerización” de las políticas sociales.
“Hoy la realidad del trabajo la expresan las organizaciones sociales en conjunto con los sindicatos. En las fábricas y en los barrios. En relación de dependencia en una empresa privada y en cooperativas y en unidades productivas”, expresaron desde el escenario los expositores. Navarro fue quien abrió el 6to congreso del Evita. Lo hizo con estas palabras: “Junto con 2.570 congresales que representan a todas las provincias del país nos reunimos para debatir, repensar y definir los ejes de construcción de nuestra organización social”. Navarro también es funcionario nacional. Se desempeña como secretario de Relaciones Parlamentarias de la Jefatura de Gabinete.