Moscú rechaza negociar un acuerdo de paz
“Entablar un proceso de negociación sería totalmente inapropiado”, dijo el consejero diplomático de Vladimir Putin.

Rusia descartó este lunes cualquier negociación con Ucrania “en la fase actual” de la guerra ante la ofensiva lanzada por tropas de Kiev hace dos semanas en la región rusa de Kursk.
En medio de una ola de declaraciones entre Moscú y Kiev, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, aseguró que sus fuerzas están “alcanzando sus objetivos” en el frente ruso, donde iniciaron una operación a gran escala el 6 de agosto.
Zelenski afirmó que sus fuerzas controlan más de 1250 kilómetros cuadrados y 92 localidades en territorio ruso. “Debemos forzar a Rusia, con todas nuestras fuerzas y nuestros socios, a hacer la paz”, afirmó. Según Kiev, uno de los objetivos de esta ofensiva es obligar al Kremlin a participar en unas “negociaciones justas” y no ocupar permanentemente los territorios tomados.
Zelenski además volvió a pedir a sus aliados occidentales que autoricen a Ucrania a usar misiles de largo alcance para atacar en profundidad el territorio ruso y así poder “detener el avance” de las fuerzas de Moscú en el este.
La ofensiva ucraniana tomó por sorpresa a Moscú. Este lunes voceros del Kremlin descartaron sentarse a negociar con Ucrania un acuerdo de paz.
“En la fase actual, dada esta aventura, no hablaremos”, dijo Yuri Ushakov, el consejero diplomático del presidente Vladimir Putin, al medio ruso Shot. “De momento, entablar un proceso de negociación sería totalmente inapropiado”, subrayó.
Las conversaciones entre ambas partes están completamente bloqueadas desde la primavera boreal de 2022, poco después del comienzo de la ofensiva militar rusa en Ucrania.
Moscú exige a Kiev que acepte la anexión de una parte de su territorio, mientras que Zelenski reitera que la paz solo será posible si el ejército ruso se retira completamente, incluido de la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014.
El mandatario ucraniano dijo querer elaborar un plan para noviembre, que sirva de base para una futura cumbre por la paz a la que el Kremlin debe ser invitado.