Juicio por el atentado a CFK

Eduardo Prestofelippo, más conocido como “El Presto”, declaró este miércoles en el juicio por el intento de asesinato de Cristina Kirchner, en el que están imputados Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo.

“Con Uliarte tuvimos un encuentro sexual una noche y nada más”, dijo el periodista en la audiencia cuando la fiscal Gabriela Baigún le preguntó sobre su relación con la imputada. “Yo la conocía como Ambar, no como Brenda”, afirmó y agregó: “Jamás hablé de política con ella”.

“Quiero aclarar que no sabía que vendía contenido erótico, ni tuve un romance. Nos escribíamos de vez en cuando, la vi dos o tres veces en eventos y una sola vez fue un encuentro sexual”, reiteró.

“Todo esto me afectó mucho, porque están ensuciándome. Jamás se me pasaría por la cabeza mandar a matar a alguien y cargar la culpa con la muerte”, sostuvo el youtuber.

La fiscal le preguntó si conocía a dirigentes de Nuevo Centro Derecha y Revolución Federal. “Al único que conozco es Martín Almeida. No conozco a nadie más. Acá hay muchas especulaciones y suposiciones”, aseguró.

El youtuber tuvo un exabrupto en medio de su declaración y se refirió al comportamiento de los abogados durante la audiencia. “Acá se han comportado muy burdamente. Estas personas se están cagando de risa, perdón, se están riendo burlonamente, ¡pero qué es esto, carajo! Acá han querido matar a una vicepresidente”, gritó. La jueza Sabrina Namer lo cortó y le pidió que se maneje con respeto.

Sobre la denuncia por amenazas contra Cristina Kirchner, en la que publicó un tuit en X que decía “Usted no va a salir viva de este atentado social”, sostuvo: “Se sacó de contexto. Nunca dije que iba a matar a Cristina Kirchner. No le deseo la muerte a nadie”.

“Yo a Cristina jamás le deseé la muerte, la quiero viva eternamente, y que si tiene que pagar culpas en la Justicia por hechos de corrupción, que tenga prisión efectiva hasta el último día de su vida”, agregó.

La investigación se centró en pistas que aparecieron en el teléfono de Uliarte y daban cuenta de una relación con Prestofelippo y un posible vínculo con el atentado. Aquellos chats sugerían una “actitud obsesiva” por parte de la acusada en su intención por vincularse con el periodista, o -en palabras de Brenda- “mi crush” (persona especial).

Según conversaciones que forman parte del expediente, Uliarte llegó a contactar a una persona para que “hackeara” el teléfono y las redes sociales de “El Presto” y le reportara con quién hablaba. Además, mandó a seguirlo para saber en dónde estaba. “Sabemos dónde están nuestros crush 24/7 somos un FBI amateur jaja”, decía uno de los mensajes.

Fernando Sabag Montiel, novio de Brenda y quien intentó matar a la entonces vicepresidenta, conocía el vínculo entre Uliarte y “El Presto”. Lo recordó durante su declaración en el juicio, pero dijo que desconocía cómo era su relación y de qué hablaban en los mensajes.