Lo secuestraron por una disputa narco y utilizaron inteligencia artificial para engañar a su familia
Todas las pruebas recolectadas por la investigación dan a entender que Gastón Tallone fue torturado y asesinado en una quinta en Benavídez luego de que uno de sus socios lo secuestrara.
Gastón Tallone lleva desaparecido siete meses. Fue visto por última vez el 8 de julio al mediodía, cuando se subió al auto de su compañero de trabajo Juan Carlos Miró, en pleno centro del barrio porteño de Once.
De aquel momento a hoy pasó de todo: una investigación por narcotráfico, un secuestro extorsivo, deudas millonarias, amenazas a familiares y la confirmación de que los agresores utilizaron inteligencia artificial para hacerle creer a su hijo que Tallone le había enviado un mensaje durante su cautiverio.
“Hola Niki ¿cómo estás, hijo? Estoy bien, pero con poco tiempo antes de que me caigan. Juntate con el enano para que le diga a Memi que haga una denuncia contra el papafrita gil de mierda de José. Que diga que fueron a la casa de mamá a pedir que devuelva la que me llevé. No se regalen con Santi que el gil de mierda de Juliá sigue caminando. Borrá el mensaje. Abrazo grande hijo“, fue el mensaje que recibió Nicolás Tallone en su celular el 13 de agosto.
Para ese entonces su papá hacía ya un mes que estaba desaparecido y las pruebas que habían recolectado los investigadores daban a entender que el empresario había sido torturado y asesinado, y que luego su cuerpo había sido descuartizado y prendido fuego para que no lo encontraran.
Su familia tampoco tenía esperanzas de encontrarlo vivo, pero presionaba para que la investigación continuara y pudieran, al menos, encontrar el cuerpo del hombre que a día de hoy sigue desaparecido. “Se baraja la posibilidad eventual de que haya ocurrido lo más grave, pero no perdemos las esperanzas de que aparezca con vida”, había dicho a TN Lucio De La Rosa, el abogado que representaba a la familia en aquel momento.
El mensaje le pareció extraño a Nicolás, pero más raro le parecieron los tres audios que recibió luego de contestarle. Eran audios cortos y precisos, pero alcanzaron para llamarle la atención.
“Hola Niki, ¿cómo estás, hijo?“, fue el primero que llegó a su celular. Su padre jamás le había dicho ”Niki» y no solía utilizar ese tipo de palabras en las charlas cotidianas, lo que hizo crecer sus sospechas.
El segundo parecía ratificar una de las teorías que se analizaban en aquel momento: la de que Tallone se había ido a Brasil, donde estaría custodiado por un hombre de mucho poder. “No puedo hablar ahora, estoy con los monos en Brasil, los amo», decía otro audio. “Cualquier cosa hablá con Veneno“, agregaba un tercero.
La sospecha de Nicolás terminó por confirmarse esta semana, cuando el informe de la División Acústica Forense de la Policía Federal determinó que los audios habían sido generados con inteligencia artificial para simular la voz de Tallone.
Varios son los motivos que lo confirman. En las grabaciones que analizó la Justicia no hay respiraciones ni pausas para tomar aire, las combinaciones de palabras no son naturales y no se observa el famoso efecto «Lombard“.
El efecto “Lombard” consiste en que las personas suelen hablar —de manera inconsciente— más alto cuando se está en ambientes ruidosos. Esto, según los especialistas, no suele ocurrir en los mensajes generados por la IA.
De esta manera, la hipótesis que sostiene la Justicia es que Tallone fue asesinado y que los secuestradores enviaron esos audios para engañar a la familia.
Entre las distintas pruebas que confimarían su muerte, hay dos que sobresalen: no hay registros migratorios que indiquen que salió del país y tampoco hay movimientos bancarios en los últimos siete meses.