Cayó “la mafia del Hentai”
Están acusados de ser los autores de las amenazas en las estaciones de trenes.
Un grupo de jóvenes quedó detenido acusado de haber sido responsable de al menos 30 amenazas de bomba realizadas en el último tiempo, dirigidas a estaciones ferroviarias, a la Casa Rosada, al Congreso Nacional, a la Cámara Nacional Electoral, a instituciones educativas y a la sede de campaña de Unión por la Patria en las elecciones del 22 de octubre.
Fuentes policiales y judiciales indicaron que las detenciones se produjeron en el marco de una causa que tramita en el juzgado federal a cargo de Julián Ercolini, en donde tres jóvenes fueron acusados de realizar una serie de amenazas que causaron demoras y malestar en la Ciudad de Buenos Aires.
En la deep web se autodenominaban “la mafia del Hentai”. La Policía cree que además son responsables de otras 30 amenazas e investiga si esto sucedió en el marco de una causa denominada “operación hacker”.
En los últimos días, las líneas Roca y Sarmiento dejaron de funcionar por dos amenazas de bomba que se registraron en paralelo.
Ayer, Trenes Argentinos informó que lo mismo estaba ocurriendo en las líneas Sarmiento, Urquiza, Belgrano Sur y Roca, que comenzaron la mañana con demoras y cancelaciones a raíz de una serie de amenazas de bomba en cadena que produjeron en menos de 15 minutos.
Clarín precisó que la investigación comenzó durante el día de las elecciones, el pasado 22 de octubre, cuando llegaron amenazas de bomba contra el búnker de Unión por la Patria en el Complejo C del barrio porteño de Chacarita y contra el Comando Electoral.
El líder de la banda, identificado como M., es un joven de 18 años, hijo de un ex comisario de la Policía de la Provincia de Buenos Aires que fue desafectado de la fuerza y tenía antecedentes de amenazas.
Al ser detenido, el joven expresó que “se levantaba todas las mañanas enojado con el sistema” y por eso se dedicaba a combatir y a realizar amenazas. El chico tiene además antecedentes por otros casos de estafas.
Hasta el momento se identificaron al menos unos 30 hechos de amenazas relacionados a dicha banda, que derivaron en pérdidas millonarias por la suspensión de los servicios afectados.
La investigación llevada a cabo por los funcionarios policiales, con la colaboración de especialistas de áreas de Antiterrorismo y Cibercrimen, detecó que las amenazas eran realizadas a través de varias líneas telefónicas de Telecentro.
Una parte de los detenidos se dedicaba a hackear las cuentas de los clientes de la empresa, gestionándoles -sin su consentimiento- nuevas líneas telefónicas a su nombre.
Luego de adquirir las líneas fraudulentas utilizaban redes Wi-Fi públicas para realizar las amenazas a través del 911. Eso les permitía evitar ser rastreados.