Francia: la izquierda quiere formar gobierno tras el triunfo
Intentará llegar al Palacio Matignon, pero no le dan los números.
Los franceses pusieron el guiño para doblar a la derecha, pero terminaron dando un giro sorpresivo hacia la izquierda. El triunfo del Nuevo Frente Popular en las elecciones legislativas del domingo en Francia no solo postergó una vez más a la ultraderechista Agrupación Nacional, sino que puso a una heterogénea coalición de izquierdas como primera fuerza en la nueva Asamblea Nacional.
La tradición democrática le impone al presidente Emmanuel Macron que le dé a la fuerza con mayor cantidad de bancas la posibilidad de formar gobierno. Pero el frente de izquierdas -donde conviven los moderados socialistas, los ecologistas, el Partido Comunista y los radicales de La Francia Insumisa del combativo Jean-Luc Melénchon- carece de los escaños suficientes para asumir el poder.
La alianza lo sabe, pero aun así hará su jugada para intentar dar el zarpazo y atraer agua a su propio molino en caso de que no alcance el número necesario para llegar al Palacio Matignon, residencia oficial del primer ministro. El frente es hoy la primera minoría con 190 de los 577 escaños, delante del oficialista Juntos por la República de Macron con 160 y la extrema derecha de Marine Le Pen y sus aliados con 140.
“El Presidente de la República debe recurrir al Frente Popular para gobernar“, reclamó Mélenchon, un líder radical que reivindica al “chavismo”. Pero primero la alianza deberá pasar por una dura lucha interna para elegir a un candidato entre fuerzas que se identifican como “progresistas”, pero que mantienen fuertes diferencias políticas e ideológicas a la hora de armar un programa de gobierno.