Liverpool ganó la Copa de la Liga inglesa

Tras empatar 0-0 en los 90 minutos reglamentarios y en el alargue, el encuentro se definió por penales y allí los futbolistas dieron cuenta de una gran efectividad en sus ejecuciones. Finalmente, el arquero Kepa erró su remate y le permitió a los dirigidos por Jürgen Klopp imponerse en la serie por 11-10 en el estadio de Wembley.

l primer tiempo mostró a una Liverpool dedicado a la posesión de la pelota ante un Chelsea que buscaba lastimar a través de sus ataques directos. En una de las ocasiones más claras, el arquero Edouard Mendy tuvo una monumental doble tapada ante Keita y Sadio Mané. La mejor para los de Thomas Tuchel fue un intento de Mason Mount que salió desviado.

Ya en el complemento, Mount tuvo otra gran chance, pero estrelló su remate en el palo. Después, el egipcio Mohamed Salah dispuso de su oportunidad tras un grave error en la salida de Mendy con los pies, pero el egipcio cruzó demasiado la pelota, que se fue afuera. Instantes más tarde, Alexander Arnold mandó un centro que cabeceó Mané en el segundo palo para que el alemán Joel Matip marcara casi sobre la línea. Sin embargo, el VAR se interpuso al anular el tanto por falta del holandés Virgil van Dijk sobre un defensor del Chelsea.

Culminados los 90 minutos reglamentarios, no lograron sacarse diferencias y fueron a la prórroga. Allí fue Chelsea el que estuvo cerca de quedarse con el triunfo, pero la acción más clara fue anulada por un milimétrico offside de Romelu Lukaku. En el último instante del alargue, Tuchel dispuso el cambio en el arco: Kepa tomó el lugar de Mendy, que había tenido un gran partido. El objetivo era provechar la mayor efectividad del guardameta vasco en los penales.

La definición por penales, a pura efectividad
Sin embargo, la fortuna no estuvo del lado de los Blues. En total, se patearon 22 penales. Hubo 21 aciertos consecutivos a partir de la altísima efectividad de los futbolistas de ambos equipos. Cuando llegó el momento de los arqueros, el irlandés Caoimhin Kelleher acertó su disparo y le tiró toda la presión a Kepa. El arquero español se paró desde los doce pasos, tomó carrera y finalmente mandó la pelota por arriba del travesaño, dándole así la consagración a los de Klopp.